Enamorarse de un labial que es tendencia, pero al ponértelo no eres tú. ¿Te suena? No te preocupes, no te volverá a suceder si sigues algunos sencillos consejos que te damos a continuación para acertar con tu color de labios ideal.
El cuidado de la piel y el color de labios adecuado
Tenemos ya muy interiorizado que el cuidado de la piel es esencial para mantener un aspecto atractivo y saludable. Esto exige una serie de atenciones básicas como son la protección de las radiaciones solares, la adecuada limpieza del cutis y la elección acertada de los cosméticos y productos de belleza.
Igual que a la hora de elegir el tratamiento para el rostro (crema hidratante, nutritiva, anti arrugas, etc) hay que fijarse previamente en el tipo de piel para decidir con acierto, para escoger el maquillaje de labios habrá que hacer algo similar.
Por esa razón, el primer requisito que debe cumplir un lipstick es que se trate de un producto dermatológicamente testado y de calidad contrastada en su composición.
Cumplido este primer requerimiento, puedes ya fijarte en la tonalidad más adecuada. Y para ello, nada mejor que observar dos aspectos fundamentales: el tono de piel y el color del cabello. Veámoslo con detalle:
– Tez clara y cabello rubio: a mayor claridad de piel, más aconsejables los tonos oscuros, desde rojos a morados, pasando por la gama de los rosas.
– Tez clara y cabello oscuro: un tono violeta o rosáceo será adecuado en caso de tener también los ojos claros; en caso contrario, mejor los tonos salmón y terracota.
– Tez clara y cabello rojizo: aquí el consejo es unánime, siempre tonos anaranjados; en sus variantes coral, mandarina o melocotón.
– Tez oscura y cabello rubio o cobrizo: dan buen resultado los tonos nude en la gama de rosas o bien, terracotas o rojizos.
– Tez oscura y cabello oscuro: favorecen las tonalidades cálidas, como dorados, tostados, marrones o rosados oscuros.
La forma de los labios también es importante
Desde luego, la forma y apariencia del labio es también un dato esencial a tener en cuenta. Sobre todo, para decidir si te decantas por productos con brillo o en tono mate.
De este modo, los labios carnosos aconsejan elegir un tono mate, que produzca un efecto óptico reductor, mientras que los labios finos ganan mucho con los lipsticks que aportan brillo, al crear una sensación de mayor volumen.
Por esa misma razón, no es recomendable aplicar el toque gloss a los labios gruesos, justo al contrario que a los labios más estilizados, a los que sí conviene un toque de brillo en la zona central, para aportar un plus de volumen y jugosidad.
Si vamos a renovar el labial, ahora contamos con algunos consejos que esperamos que sean de utilidad.
